Bodegas Morosanto

En la finca donde se sitúa la Bodega se ubica un importante asentamiento romano, que ha sido excavado para que los visitantes puedan contemplar los restos de la villa romana, una gran piscina o "natatio", así como un lagar que atestigua la elaboración de vinos desde el siglo I. donde son visibles las "dolias" o recipientes para la fermentación de los caldos.

Bodegas Morosanto realiza visitas guiadas con un idílico paseo entre las vides y una panorámica desde una terraza donde se han instalado unos paneles explicativos de la evolución de la viña y de la uva año tras año. Posteriormente se recrea el proceso de elaboración del vino, pasando por la sala de barricas donde se completa la crianza. Y terminando en la sala de catas donde se aprecia el resultado del trabajo de elaboración del vino a lo largo de la historia.

Bodegas Morosanto ofrece también senderismo para visitar las minas de Sal a los pies de la Sierra de Las Cumbres, donde se asienta uno de los yacimientos más característicos del poblamiento íbero de la zona. En esta sierra nace también el río Guadalcobacín, que recoge sus aguas de diversos nacimientos. La ruta discurre por senderos marcados y tiene una duración aproximada de una hora y media.

Bodegas Morosanto produce en la actualidad cuatro variedades de vino: rosado, blanco, y los tintos Lucio y Lunera. Éste último es su producto estrella, un vino brillante, de color violáceo y capa alta. En nariz muestra complejidad y buena intensidad, con aromas inicialmente terciarios, tostados bien marcados, especias, ligeros toques de vainilla, hierbas silvestres aromáticas, regaliz y un final de fruta roja madura. En boca se muestra potente, graso y goloso, con un tanino presente que armoniza el conjunto.